Mantillas negras para acompañar a La Piedad
El Viernes Santo vuelve a vivirse intensamente en Bailén. Miles de personas abarrotan las calles, llenas ya de cera, para acompañar en su estación de penitencia a la imagen de la Piedad. Junto a la cofradía de Jesús a su entrada en Jerusalén y Nuestra Señora de la Piedad, pequeños y mayores admiran el paso de misterio que representa la imagen de la Virgen sosteniendo el cuerpo ya muerto de Jesucristo. Una imagen dolorosa que abre el camino para la celebración, la noche del Viernes Santo, del Santo Entierro.
Decenas de penitentes rojos y blancos precedían el cortejo procesional donde, además, llamaban la atención las alrededor de cien mujeres de riguroso luto ataviadas con la tradicional mantilla negra.
La Agrupación Musical San Juan de Bailén ha sido la encargada de acompañar la imagen de la Piedad, a quien, paralelamente, se le han dedicado varias saetas desde diferentes balcones bailenenses.