El albergue para temporeros de Bailén cerraba el pasado día 21 por ausencia de demanda. Tras un mes abierto, que era el tiempo inicial establecido, ha propiciado que las instalaciones no se mantuvieran más tiempo abiertas. El cierre se une a los de Beas de Segura, Navas de San Juan, Torreperogil, Ibros y Villacarrillo.

La concejala de Bienestar Social, Igualdad y Salud, Alfonsa García, afirmaba que este año han pasado por las dependencias un total de treinta y ocho personas, diez menos con respecto al pasado año. García matizaba que “diariamente ha habido demanda, especialmente después del puente de la Constitución” y añadía que “hubo personal del centro pendientes hasta el mismo viernes pasado por si llegaba alguien para atenderlo, pero ante la ausencia decidimos no ampliarlo más”.

Como explicaba recientemente la Delegación del Gobierno andaluz tras recabar la información desde los respectivos ayuntamientos, el número de plazas abiertas se ha reducido de 717, cuando estaban los 22 abiertos, a 653 plazas que hay en la actualidad.

La red de albergues para temporeros constituye un recurso único en el país para dar cobertura a quienes puedan trasladarse a Jaén buscando un tajo en la recolección de la aceituna, algo no especialmente fácil.

Y es que, al igual que en las últimas campañas, desde las administraciones se ha incidido en que no se necesita mano de obra foránea, teniendo en cuenta sobre todo las altas cifras de desempleo en la provincia.

El Foro Provincial de la Inmigración de Jaén –del que forman parte tanto las administraciones públicas como organizaciones no gubernamentales, sindicatos y empresarios– fijó como horquilla para la apertura de los centros del 14 al 21 de noviembre. Finalmente, fue a partir de esta última fecha cuando comenzaron a funcionar los primeros y se han ido sumando paulatinamente hasta quedar dos por abrir.