Más de mil personas han sido hoy testigos de la inauguración oficial de las nuevas instalaciones de la cooperativa Agrícola de Bailén Virgen de Zocueca, también conocida por su marca Picualia, dando así por concluido un largo proceso de unificación y creación  de nuevos espacios que han dando paso a una de las almazaras visitables más avanzadas del mundo. Un proyecto que ha supuesto una inversión de 12 millones de euros, de los que la administración andaluza ha aportado más de 5,5, millones.

La inauguración ha estado presidida por la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, acompañada por el presidente de Picualia, Gabriel Alonso, el alcalde de Bailén, Chiqui Camacho, el presidente de la Diputación Provincial, Francisco Reyes, y María del Carmen Ortiz, consejera de Agricultura.

Susana Díaz ha tirado de refranero para felicitar a la junta rectora por la nueva cooperativa afirmando que «la unión hace la fuerza y eso es lo que entendieron los cooperativistas: por eso estamos aquí». La presidenta ha asegurado que desde la Junta entendieron desde un primer momento que debían «ayudar y agilizar los trámites necesarios y aportar los recursos económicos necesarios para poder estar hoy aquí inaugurando estas magníficas instalaciones». Díaz, quien ha podido hacer un recorrido guiado por Picualia y aprender más acerca del trabajo de una almazara, ha manifestado en su discurso inaugural que el apoyo económico de la administración andaluza «ayudará a las familias de los más de 950 socios de la cooperativa y, a la vez, tengamos un producto de mayor calidad», insistiendo en que «el reto del olivar es que cada vez envasemos más y que el precio sea más justo, que renozca el esfuerzo que se hace».

El presidente de la cooperativa Agrícola de Bailén Virgen de Zocueca, Gabriel Alonso, recordaba en su discurso aquel año 2005, cuando «a un grupo de agricultores de esta noble ciudad de Bailén se nos ocurre fusionar las dos cooperativas existentes«, formando una gran empresa que cubriese las necesidades de todos los socios. Con la necesidad de trasladar las instalaciones fuera del casco urbano, Alonso reconocía que uno de los objetivos de la fusión era «poder ofrecer un valor añadido al producto y a los socios», apostando por un proyecto arriesgado en unos momentos económicos más que difíciles. «Hemos ido superando las distintas e innumerables dificultades que se nos han presentado», por lo que ha agradecido su esfuerzo al consejo rector, los socios, los trabajadores de la cooperativa y todas las entidades que han prestado apoyo financiero y económico para que hoy en día sea una realidad.

Por su parte, el alcalde de Bailén, Chiqui Camacho, ponía como ejemplo la fusión de las dos cooperativas bailenenses «por el bien de todos y no por el bien propio». Camacho no ha dudado en afirmar que las de Picualia son «las mejores instalaciones de Europa, las más modernizadas, el resultado del esfuerzo, del tesón y las ganas de entendimiento, poniendo primero lo importante y no lo personal». Sin obviar el asunto del discurso inaugural, el alcalde de Bailén ha aprovechado su intervención para reivindicar la lucha por la situación de Bailén «un pueblo maltratado: tenemos que unirnos todos, sin ideologías ni clases sociales, luchando para sacar a Bailén de donde se encuentra». Por ello, ha entregado a la presidenta de la Junta una carta: «le voy a pedir sólo que la lea, porque el corazón y las ilusiones de los bailenenses están en ella; sólo voy a añadir una cosa: que la próxima vez que la tengamos aquí sea poniendo la primera piedra del Centro de Transporte de Mercancías». Susana Díaz, quien ha recogido la carta de manos del alcalde, ha asegurado que la leerá porque «lo que es bueno para Bailén es bueno para Andalucía».

Un largo y costoso proceso
Tras varios años de trabajo, en diciembre de 2014 se finalizó el proyecto de traslado y perfeccionamiento por la fusión de las dos cooperativas de Bailén (Agrícola de Bailén y Virgen de Zocueca). El resultado está a la vista de todos aquellos que han pasado por allí: una vistosa y moderna almazara de cuidado diseño con una capacidad de molturación de hasta 30.000.000 kilos de aceitunas para elaborar un aceite de oliva virgen extra de gran calidad. Todo ello ha sido posible gracias a un volumen de inversión de 12 millones de euros, de los que el gobierno andaluz ha aportado 5,6 millones.

Sus nuevas instalaciones, además, apuestan por el diseño y la excelencia para difundir la cultura del aceite de oliva virgen extra a través de un centro visitable y un espacio destinado a albergar congresos, simposios médicos y otras actividades, tal y como detallan desde Picualia en una nota de prensa.

Protestas y reivindicaciones
La visita de la presidenta de la Junta de Andalucía no es algo que ocurra todos los días, por lo que las nuevas instalaciones de Picualia también han sido escenario de protestas y reivindicaciones. Es el caso de la plataforma de vecinos de la localidad de Campillo del Río, quienes vienen reivindicando la construcción de un puente sobre el río Guadalquivir que permita salvar el vado que les deja incomunicados cada vez que llueve. Su intención era regalar a Susana Díaz la camiseta reinvidicativa que ellos mismos llevan puesta con el lema «Puente ¡YA!».

También los miembros de Todos por Bailén han acudido al acto con una pancarta en la que se podía leer «La Junta discrimina Bailén».