Pequeñas colas en el cierre de los colegios electorales
A las 20 horas, de manera puntual, todos los colegios electorales cerraban para comenzar el recuento de votos bailenenses en una jornada marcada por la abstención. Sin embargo, y como era de esperar, minutos antes del cierre aparecían las prisas y las pequeñas colas de los votantes más rezagados que, pese a la tardanza, no querían dejar pasar la oportunidad de votar.
Como anécdota de la jornada queda la de un votante que, a falta de tres minutos para el cierre, erró en el sitio para emitir el voto y tuvo que echarse a la carrera en busca de su colegio electoral. Curiosa también la carta que se encontraron dentro de un sobre en la única mesa del IES María Bellido donde el votante expresaba el malestar hacía el sistema.
Seguidamente, apoderados e interventores remitían los resultados hacia los organismos oficiales y las sedes locales de los partidos, donde empezaba el baile de números entre votos y porcentajes hasta la publicación de los datos oficiales a nivel nacional a las once de la noche. Con los líderes, afiliados y simpatizantes parapetados en sus sedes, las alegrías llegaban para unos y otros, acabando la jornada electoral entre análisis y datos.