Sin discursos, pompas ni boatos. Simona Villar no pronunció ningún discurso de despedida en el último pleno de la legislatura, que se celebró este miércoles, y que fue su última intervención en lo que a plenos se refiere, ya que ha renunciado a su acta como concejal para el próximo mandato. Se diferencia así del final de otras legislaturas, donde alcaldes y concejales solían aprovechar para despedirse del cargo, de la corporación y de la propia legislatura. Además, hubo hasta tres ausencias en la bancada socialista, con sólo cinco concejales presentes en el último pleno de la legislatura.

Aunque ni ella ni ninguno de los concejales que no seguirán en su sillón a partir de la próxima semana dedicaron unas palabras de despedida, la todavía alcaldesa de Bailén sí quiso terminar la sesión deseando suerte a los nuevos concejales y concejalas que conformarán la corporación municipal en pocos días. Por su parte, el portavoz del grupo municipal del PP, Chiqui Camacho, deseó también suerte a Simona Villar en su nueva andadura.

La sesión plenaria fue un puro trámite para dejar aprobada la sesión del anterior pleno antes de que este próximo sábado comience la nueva legislatura y Chiqui Camacho sea investido nuevo alcalde de Bailén.