La patrona de Bailén, Nuestra Señora de Zocueca, se ha visto hoy acompañada por miles de bailenenses que, a su lado, han cumplido un año más con la tradicional peregrinación hasta la aldea del Rumblar. Una romería que se remonta al siglo XIX, cuando los hortelanos de San Vicente procesionaron junto a su virgen como muestra de gratitud por haber visto salvados sus campos de una plaga de langostas.

Tras la misa celebrada en la parroquia de La Encarnación, en torno a las 7 de la mañana el repique de campanas anunciaba a los bailenenses que su patrona salía a las calles. Una multitud se iba sumando a su recorrido, con momentos significativos como la llegada al Paseo de las Palmeras y el movimiento frente a la ermita de la Limpia y Pura, o la entrada de Nuestra Señora de Zocueca a la iglesia de El Salvador. Tradicional y emotivo es también el homenaje de Ritmo del Sur a la patrona, marcando el punto de salida desde su pueblo a su aldea. Una romería si cabe más especial por el anuncio de la próxima Coronación Canónica de la virgen de Zocueca.

Miles de bailenenses han ido arropando a la virgen en los siete kilómetros de recorrido con visita obligada a El Ventorrillo, donde el alcalde de Guarromán, Alberto Rubio, entregaba su bastón de mando al alcalde de Bailén, Luis Mariano Camacho, escenificando el “cambio” de alcaldía durante la romería en la aldea guarromanense.

Ya en Zocueca, los bailenenses acompañaban a su patrona en la misa celebrada frente al Santuario del Rumblar, con los sones del Coro Mejorana. Al finalizar, la virgen recorría las calles de la aldea junto a la banda de música de Bailén.