La lluvia desluce la Romería en honor a la patrona de Bailén
A paso ligero y con la mirada puesta en el cielo, miles de bailenenses acompañaron a la patrona de Bailén, Nuestra Señora de Zocueca, hacia la aldea del mismo nombre. Allí aguardaban centenares de romeros, este año muchos menos, que acampaban desde días previos a la romería que esperaban la entrada a la aldea guarromanense.
Tras la misa celebrada en la Parroquia de la Encarnación comenzaba el peregrinaje hacia el Santuario del Rumblar en la aldea de Zocueca, como se hace tradicionalmente cada último domingo de septiembre. Miles de fieles desafiaron a un cielo encapotado que en todo momento amenazaba lluvia completando los siete kilómetros que distan entre Bailén y Zocueca. Asimismo, las treinta y dos carretas participantes en la noche anterior acompañaban a la patrona en su recorrido.
Antes de entrar en la aldea, en torno a las nueve y media, hubo visita obligada a El Ventorrillo donde la concejala guarromanense Juana María Arroyo, hizo entrega del bastón de mando, a la alcaldesa de Bailén, Simona Villar, quien fue por un día alcaldesa de la aldea. Sería en El Ventorillo donde la lluvía se erigiría protagonista desluciendo esta jornada festiva.
Una vez llegada la venerada imagen al Santuario del Rumblar se producía uno de los momentos más emotivos con centenares de bailenenses agolpándose para recibir a su patrona en la aldea bajo los sones de la Banda de Música de Bailén. Tras los vivas y aplausos, la imagen de la Virgen de Zocueca -envuelta en un plástico para preservarla de la lluvia- se introducía en el Santuario para comenzar desde su interior la eucaristía, que contó con la presencia del Coro Romero Mejorana. Los actos finalizaron por la tarde con el canto de la salve en el Santuario del Rumblar.
Por otro lado, la normalidad y la ausencia de incidentes, como ha informado la Policía Local a Bailén Diario, han sido también protagonistas en esta romería que como es tradición se empieza a celebrar por parte de los más jóvenes desde días antes.