5. María Bellido, entre la historia y la leyenda. Tras las huellas de María Bellido.
Si damos por cierto el estudio de Manuel López Pérez, en el que entre el 7 y 8 de marzo de 1809 falleció la heroína local María Bellido, coincide con el día de la Mujer Trabajadora dicha efemérides. 205 años hace, pues, de su muerte.
En el trascurso de nuestra historia local han quedado impregnadas con el sesgo de lo legendario o mítico algunos hechos que hoy son ya patrimonio tradicional de los bailenenses. Tal vez la más significativa presencia en este tipo de aspectos sea el de nuestra celebérrima heroína María Bellido.
Una pregunta nos hacemos en este momento: ¿existió real e históricamente una heroína bailenense a la que, junto con otras muchas valientes lugareñas anónimas, le cupo el honor de levantar altiva los restos del cántaro y ofrecer agua al general? Grandes batallas de la Guerra de la Independencia española tienen su heroína particular (Agustina de Aragón, Manuela Mala saña, Clara del Rey…), por lo que nos preguntamos: ¿pudo ser inventada o tergiversada la nuestra para equipararse con ellas?
Voy a centrarme, grosso modo, en volver a destacar lo que ya dejara escrito en mi artículo titulado «Entre la historia y la leyenda» (Programa de Fiestas de 2007, pp. 116-120), en su epígrafe cuarto, “María Bellido, la Culiancha”. Y en volver a citar los trabajos de Manuel López Pérez «María Luisa Bellido, la heroína de Bailén» (Boletín del Instituto de Estudios Giennenses, nº 46, 1978 y Revista de Historia Militar, Año XXIV, nº 49 y año XXV, 1981, nº 50) y el de Antonio Aranda Castro, «María Inés Juliana Bellido Vallejos. La heroína de Bailén», (Boletín del IEG, nº 134, 1988, págs. 25-30). Y, asimismo, en volver a reseñar el trabajo de nuestro paisano Juan Soriano Izquierdo («Mitos y leyendas para una Batalla. María Luisa Bellido», revista Solera, nº 5, 2006).
Como es obvio, la relectura de todos ellos se nos hace indispensable para extraer conclusiones sobre la veracidad, fiabilidad histórica o, por el contrario, para extraer la conclusión de tratarse de un hecho legendario y no histórico, aunque toda leyenda nace de un hecho histórico concreto. Historia y Leyenda para una mujer de bandera.
Expondré, con la mayor brevedad que me sea posible, el devenir cronológico del asunto de la existencia o no de la heroína María bellido, tanto en su aspecto legendario como en el histórico.
-
PRIMERA ALUSIÓN, 1814. (6 años después de la Batalla).
En «Baylén. Descripción de la batalla y auxilios que en ella dieron los vecinos», publicado en Jaén en 1815, aunque escrito un año antes, Antonio José Carrero, testigo presencial de los hechos, es el primero que da noticia de un hecho singular, relatando la heroica hazaña del siguiente modo:
« (…) Y lo que fue más oportuno y merecerá eterna alabanza que a porfía se destinasen seglares, eclesiásticos y muchachos, perdida enteramente la aprensión y el miedo, a llevar por sí y hacer llevar a otros agua en abundancia; cuanta se necesitó para refrescar los cañones y con que refrigerar la tropa en un día de tan excesivo calor, que lo aumentaba en sumo grado el continuo y esforzado fuego de ambos ejércitos y el que se originaba en algunos sembrados y montes que ardían.
A tan oportuno auxilio concurrieron algunas heroicas mujeres que, desentendidas de su sexo y de los riesgos, con barriles y cántaros andaban por medio del ejército, dando de beber a los soldados que admiraban su valor y patriotismo. Estando una de estas grandes mujeres dando de beber a un soldado, una bala le quebró el cántaro y ella, llena de espíritu, volvió con otro a continuar su importante obra. Compañera de ésta fue la que mitigó la sed al general Réding, quien la trató con el mayor agrado, haciendo después llamarla y tomar su nombre, ofreciendo premiarla. (…) ».
Dos, pues, fueron las que protagonizaron dicha gesta del cántaro roto, la bala enemiga y el general Reding.
-
VISITA A BAILÉN DE LA REINA ISABEL II, octubre de 1862. (54 años después de la Batalla).
Hasta ese año no aparece el nombre de Luisa Bellido (no María) en documento alguno. Francisco Rentero, diputado provincial y poeta, al ofrecer la bala que rompió el famoso cántaro, relató a la reina la célebre heroicidad que ha llegado hasta nosotros.
« (…) en lo más recio de la batalla que inmortalizó los campos de Bailén, una hija de este pueblo llamada Luisa Bellido, como otras muchas, discurría por entre las filas del ejército, prodigando consuelos a los heridos y mitigando la sed abrasadora de nuestros soldados; y al ofrecer agua al ilustre General Réding, esta bala rompió el cántaro que llevaba en la cadera. Sin inmutarse, con la serenidad del héroe, recogió del suelo el cántaro que contenía en su centro la bala apagada y una cantidad pequeña de agua y la ofreció de nuevo al General. (…) ».
Tal vez desde ese mismo año 1862 en que fuera donada una estatua de la diosa romana Iberia, representando en el sentir popular a la propia heroína bailenense, sea denominado dicho monumento como La Matrona e incluso María Bellido.
-
PRIMERA ALUSIÓN ESCRITA A SU APODO: LA CULIANCHA, 1897. (89 años después de la Batalla).
En la segunda edición de la obra de Antonio José Carrero, en 1897, aparecen las notas de Alfredo Cazabán Laguna, que dan cabida al apodo con que era conocida en Bailén, aunque no da su nombre:
«Aquella heroica hija del pueblo se llamó La Culiancha y la bala que penetró en el cántaro y que recogió ella misma, fue presentada en lujoso estuche a Doña Isabel II cuando hizo su expedición a Andalucía».
-
HIMNO A MARÍA BELLIDO, 1908. (100 años después de la Batalla).
José María Martínez y Ramón puso en la siguiente letra, cantada con idéntica música que el Himno de Bailén, y que fue grabado en disco por la Banda de Música de Bailén, dirigida por Manuel Cámara, en 2008, titulado Bailén Suena, relataba la gesta:
Himno a María Bellido
«Acudid, nobles hijos del pueblo,
para honrar a la excelsa mujer,
que entre lluvia de balas sangrientas
a la Patria sirvió de beber.
En el cáliz de un cántaro humilde,
dos milagros brindó su valor:
nuevo aliento a la causa de España
nueva sangre a la lid del Señor.
¡Agua viva, fecundo rocío,
que empapó nuestro viejo solar,
refrescando las lises del Trono
y la mística flor del Altar:
No suspendas, arroyo divino,
de tu néctar la rica merced;
¡que si ya no padece la Patria,
la Justicia y Bailén tienen sed!
Manarás y este pueblo elegido
beberá nuevas glorias en ti:
¡para dar a sus héroes tus linfas,
siempre habrá cien Marías aquí!»
-
PLACA CONMEMORATIVA A MARÍA BELLIDO, 1908. (100 años después de la Batalla).
Este es, en mi opinión, un valiosísimo dato del que nadie se ha percatado, la inauguración de una placa, el 23 de julio de 1908, en un lugar que estaba unos cinco metros más abajo de donde la menos conocido tradicionalmente emplazada. Allí estuvo hasta 1974, año en que se derribó la casa.
Es importante este dato, pues la tradición local y el acervo cultural de los bailenenses daban por cierto que ese era el lugar donde vivió María Bellido y este era su nombre y apellido, como reza en dicha placa, aparte de ser apodada por sus convecinos como la Culiancha.
«Los obreros de Bailén a María Bellido, prototipo de valor y caridad, en el centenario de su heroica hazaña. 19 de Julio-1808-1908».
-
CALLE MARÍA BELLIDO, 1929. (121 años después de la Batalla).
Ya en ese año de la década de los años veinte del siglo pasado hay constancia documental (léase a Matías de Haro) de que se llamaba así la siempre conocida como La Carrera. Otros nombres de cines, establecimientos, instituto, etc. dan testimonio de que los bailenenses heredaron un hecho histórico-legendario que se fue trasmitiendo de padres a hijos, sabiduría popular en todo su apogeo.
-
VOCABULARIO ANDALUZ, CULIANCHA, 1951. (143 años después de la Batalla)
En el Vocabulario andaluz, 1951, del andujareño Antonio Alcalá Venceslada, primer repertorio léxico completo sobre el habla andaluza, aparece el vocablo Culiancho,cha: “persona de amplias caderas. Es más culiancho que su mujer. A María Bellido, la heroína de Bailén, le llamaban la Culiancha”.
-
PRIMERA REFERENCIA A SU ORIGEN PORCUNENSE. PUBLICACIÓN DE MANUEL LÓPEZ PÉREZ, 1978. (170 años después de la Batalla).
En este trabajo presenta nuevos datos. Indica este autor que en los padrones de vecinos de años en torno a 1808 no aparece ninguna bailenense así llamada ni que residiera en La Carrera (hoy calle María Bellido), número 15, según le comunicó Pablo Morillas en 1974. López Pérez señala que Bellido no es apellido típico bailenense y sí de Andújar y Porcuna, por lo que hasta allí fueron a buscar y encontraron, bosquejando en los protocolos notariales y partidas bautismales, matrimoniales y testamento (Archivo Histórico Provincial de Jaén, tomo 6.066), a una María Luisa Bellido (o María Paula), casada con un bailenense, Luis Domingo Cobo Muela, ¿cacharrero de profesión?, que poseía un olivar en la Cuesta del Molino, una casa en Calle del Agua (1784), otra en C/ Empedrada (1792), un haza en Casa Blanca, una fanega de tierra en el Camino de Linares (1801), dos fanegas en La Zahonera, una casa en Calle Las Eras (donde María Luisa Bellido consta que vivía, según este autor)… Tuvieron luego propiedades en Horma del Duque y Viña Larga (ambas según Matías de Haro y López Pérez). Una hermana suya, Gabriela, también se afincó en Bailén y se casó con Miguel Sánchez, con domicilio ambos en Calle del Santo.
Tanto Luis Domingo como María Luisa dispusieron que se les enterrase en la nave central de La Encarnación. En julio de 1808 contaba con 65 años de edad, según este autor y habían adquirido, en 1805, en las Eras Altas, a la salida de Bailén, donde tuvo lugar la Batalla, una era, con pozo y dos fanegas de chaparral. No ha podido demostrar la veracidad de la pensión vitalicia.
Falleció el 7 u 8 de marzo de 1809, a los 66 años, un mes antes que su marido. En 1810 fueron profanados sus cadáveres, según López Pérez. Este autor, incomprensiblemente, recoge como “María Luisa Bellido” lo que en 1862 consta como “Luisa Bellido” (Francisco Rentero), según he podido constatar en el original. En el Código Histórico y Descriptivo de la Real Armería (Madrid, 1898), se describe así la ofrenda: «Jarra pequeña con bandeja, ambas piezas de plata sobredorada la primera y afiligranada la segunda. Contiene la bala de metralla que rompió el cántaro en el acto de beber agua el general Reding en la batalla de Bailén; tenía en su interior, que no existe ya y que servía de recipiente a la bala, con esta inscripción LUISA BELLIDO EN 19 DE JULIO DE 1808…«
El propio Rentero, diputado provincial que dio noticia de aquella desconocida Luisa Bellido, escribió:
Una, cuyo oscuro nombre,
si ingrata más que severa
pudo olvidarla la historia,
la crónica la conserva,
al ofrecer a Reding
agua, una bala certera
rompió el cántaro en pedazos
burlándose de la oferta.
Gracias, dijo: y escurriendo
uno tras otro ligera
los cascos en el más grande
le dio de beber risueña.
LUISA BELLIDO era el nombre
de aquella mujer intrépida.
-
NUEVAS APORTACIONES. PUBLICACIÓN DE ANTONIO ARANDA CASTRO, 1988. (180 años después de la Batalla).
En 1988 Antonio Aranda Castro publica en el BIEG su artículo «María Inés Juliana Bellido Vallejos. La heroína de Bailén» (nº 134, 1988, págs. 25-30), en el que consta, según su inscripción bautismal porcunense como María Inés Juliana (Porcuna 1755 – Bailén 1809). Contaba, pues, según Aranda Castro, con 53 años durante la contienda de 1808. Luis Domingo Cobo era viudo de Isabel Antonia Cubero. La heroína y Luis Domingo contrajeron matrimonio el 14 de octubre de 1782. Este trabajo, en palabras de su autor, supone una revisión y corrección mínima del publicado por López Pérez.
«En la Villa de Porcuna en catorce días del mes de octubre de mil setecientos ochenta y dos años, yo Don Manuel Josef González Pbro, con licencia del Sr. Prior, habiendo precedido las amonestaciones, que manda el Santo Concilio de Trento en tres continuos días festivos, «Inter Misarum Solemnia», y de ellas no habiendo resultado impedimento alguno canónico, Desposé por palabra de presente, que hicieron verdadero matrimonio «in facie eclesiae» y así mismo belé según el Orden de Ntra. Santa Madre Yglesia a Luis Domingo Covo, natural de la Villa de Baylén, viudo de Ysabel Antonia Cubero, y a María Ynés Bellido, hija de Francisco Elías Bellido y de Catalina Ballejos, naturales de esta villa, fueron padrinos el dicho Francisco Elías Bellido, y Manuela Aguilera, y testigos Pedro de Quero, y Juan, y Antonio Bellido. Firmado el Plebistero Don Manuel Josef González».
(Libro 20 de Matrimonios y Velaciones, en su folio 27 del Archivo Parroquial de Porcuna)
-
JESÚS DE HARO MALPESA, 2000. (192 años después de la Batalla).
Nuestro recordado profesor e historiador escribió para el Programa de Fiestas de 2000 su «María Bellido no hay más que dos», en el que reivindica su parentesco político con la propia María Bellido, en su condición de descendiente directo de los Malpesas de comienzos del XIX (se refería nuestro paisano a María Josefa Malpesa Sánchez, a la que en enero de 1863 se le concedió una pensión vitalicia de ocho reales diarios que estuvo recibiendo hasta 1868, por ser sobrina política, tras presentar acreditación de su derecho al cobro; no obstante, en un interesantísimo artículo intitulado «María Bellido: el misterio de un mito. La batalla de Bailén y la importancia del agua», de Milagros Soler Cervantes, y publicado en la web http://www.culturandalucia.com/JA%C3%89N/Maria_Bellido.htm, se pone en tela de juicio dicho parentesco, que pudo estar motivado por otros intereses). Da a entender nuestro ilustre escritor que María Bellido fue tan real como la propia Batalla y que una mujer anónima que dio agua a los franceses pudo ser ella misma. Yerra, no obstante, al indicar que al morir en marzo de 1809 “ni siquiera había cumplido los treinta años”.
-
REVISIÓN HISTÓRICA. JUAN SORIANO IZQUIERDO, 2006. (198 años después de la Batalla).
Juan Soriano Izquierdo, en 2006, en la revista Solera, nº 5, publica su trabajo «Mitos y leyendas para una Batalla. María Luisa Bellido», en el que retoma acertadamente las palabras de Antonio José Carrero que en 1815 dio a entender que fueron dos las mujeres bailenenses que llevaron a cabo la hazaña, llena de altivez y arrojo, del cántaro y la bala. De esta manera concluye Soriano Izquierdo, poniendo en tela de juicio la procedencia porcunense de la heroína de Bailén:
«Sin embargo, llama poderosamente la atención que en este texto la hazaña de “Luisa Bellido” sea la misma que protagonizan en el texto de don Antonio José Carrero dos anónimas mujeres del pueblo.
»Y así, aunque algunos han pretendido ver en hijas del noble y hermano pueblo de Porcuna la luz que desvela el misterio, aún guardan los arcanos la verdad de la heroína de Bailén».
-
UN SERVIDOR, 2007. (199 años después de la Batalla).
En mi artículo «Entre la historia y la leyenda» (Programa de Fiestas de 2007, pp. 116-120), ya recogí mi postura de dar veracidad a la existencia de María Bellido, aspectos, que, más pormenorizados y actualizados mediante nuevas revisiones, expongo a continuación:
HIPÓTESIS PROPUESTAS:
-
MARÍA BELLIDO FUE UN PERSONAJE REAL QUE NACIÓ EN BAILÉN.
-
MARÍA BELLIDO FUE UN PERSONAJE REAL QUE NACIÓ EN PORCUNA.
-
EL MITO DE MARÍA BELLIDO FUE UNA FICCIÓN ORQUESTADA PARA ENSALZAR LA HEROICIDAD DE LAS MUJERES BAILENENSES.
-
MARÍA BELLIDO CORRESPONDE A UNA GESTA DE DOS MUJERES, HAZAÑA QUE CON EL TIEMPO SE SIMPLIFICÓ EN UNA SOLA.
De estas cuatro hipótesis hay elementos favorables y desfavorables para una dilucidación objetiva. Enumeremos algunos de estos elementos a tener en cuenta:
-La tradición local, generación tras generación, desde 1808 hasta 1862, recogió un hecho que bien pudo ser tergiversado o exagerado, pero al relatar Francisco Rentero la heroicidad de las mujeres y referirse a una tal Luisa Bellido, nadie se opuso, bien al contrario, así debieron contárselo al propio relator. Cincuenta y cuatro años después de la Batalla aún vivirían algunos testigos de los hechos referidos, que incluso habrían conocido a María, y que lo habrían podido desmentir.
-Como bien indica Manuel López Pérez buscaron en Porcuna y Andújar a la heroína bailenense por ser más típico el apellido Bellido en esas localidades. Bien es cierto que como señaló en 1974 Pablo Morillas no había bailenenses en torno a 1808 con ese apellido, aunque escasean los documentos. Yo sólo he podido estudiar los de 1859 y, más recientemente, los de 1764, sin hallar lo que buscaba.
-En el testamento de María Bellido (1809) aparecen los nombres de algunos bailenenses, como recogen tanto López Pérez, como Aranda Castro y, más recientemente, Miguel Ángel Alonso Roa, en su artículo del Programa de Fiestas de 2013, «1813, la primera recreación Histórica de la Batalla de Bailén», dichos paisanos eran:
Alonso Villarejo (albacea de María Bellido y quien firmó en testamento. Era concejal en 1813), Francisco Cobo (sobrino), Francisco Rodríguez (auxiliar de la justicia y 2 Teniente de Alcalde), Gabriela Bellido (Calle El Santo, hermana de María Bellido), Juan Cavildo Marquina (firmó en dicho testamento), Juan de Olías Navarro (albacea de María Bellido), Juan Pérez Navarro (firmó en dicho testamento), Luis Domingo Cobo (sobrino del homónimo), Luis Domingo Cobo (otro sobrino del homónimo) y Miguel Sánchez (Calle El Santo, esposo de Gabriela Bellido).
-Hay constancia documental y testamentaria del deseo de ser enterrada en la nave central de La Encarnación.
-Los bailenenses de la época la conocían, sabían su apodo de La Culiancha (como recogió en 1897 Cazabán Laguna) y la casa y calle donde residía, que en 1808 ya está demostrado que existía, como he comprobado con planos y mapas de la época.
-No hay fuente escrita donde aparezca el nombre de María Bellido como protagonista de la hazaña, ni de la existencia de la recompensa con que la obsequió el general, ni hay constancia de pensión vitalicia concedida por ningún monarca ni Junta Central alguna.
-¿Pudo no estar muy acertado Antonio José Carrero al relatar la gesta de las dos supuestas mujeres o, tal vez, la que conocemos como María Bellido solo realizó la segunda heroicidad de la escena?
CONCLUSIONES:
Con todos estos factores tenidos en cuenta, estudiados los antecedentes en diferentes publicaciones, el conocimiento de la historia por los bailenenses que trasmitieron la citada relación, etc., soy de la siguiente opinión:
Que tuvo que existir y existió una mujer que “mitigó la sed al general Réding, quien la trató con el mayor agrado, haciendo después llamarla y tomar su nombre, ofreciendo premiarla”, independientemente de que en la escena hubiese una o más mujeres colaborando heroicamente. Que dicha mujer, de desconocido nombre, bien pudo llamarse Luisa o María o María Luisa Bellido, a tenor de lo que Francisco Rentero relató a la reina sin que ningún bailenense se opusiera o desmintiera. Que una sobrina política de aquella señora recibió una pensión vitalicia en calidad de parentesco sin consanguineidad, sin que lugareño alguno se opusiera. Que dicha heroína recibió el apodo de la Culiancha, como recogió Cazabán Laguna en 1897, quien, sin duda, preguntaría entre los vecinos bailenenses o a conocidos bailenenses suyos. Que desde el mismo 1808 el conocimiento de la hazaña fue trasmitido de padres a hijos, por lo que en los más profundos adentros populares de la Muy y Leal Ciudad constaba como tal, motivo por el que en 1908 se le compuso un himno, se le descubrió una placa y, una década después, se le dio nombre a una calle donde residiera.
Por desvelar y demostrar con rotundidad queda, eso sí, si era de origen porcunense, si casó con un bailenense llamado Luis Domingo Cobo Muela, si corresponde a ella el testamento que pudo contemplarse no ha mucho en La Encarnación, si está sepultada en dicho templo, cuál es su fecha de nacimiento y defunción y cuáles eran su nombre y apellidos completos.
Tal vez no haya que buscar mucho para encontrarla, pues en cada mujer bailenense sigue habiendo una altiva y heroica damisela que lucha por la libertad.
Francisco Antonio Linares Lucena
Bailén, 7 de marzo de 2014.
Bibliografía.
-
Alonso Roa, Miguel Ángel: «1813, la primera recreación Histórica de la Batalla de Bailén». Programa de Fiestas de 2013, pp. 60-61.
-
Aranda Castro, Antonio: «María Inés Juliana Bellido Vallejos. La heroína de Bailén». Boletín del IEG, nº 134, 1988, págs. 25-30.
-
Carrero, Antonio José: «Baylén. Descripción de la batalla y auxilios que en ella dieron los vecinos». Jaén, 1815. 1ª edición.
-
Carrero, Antonio José: «Baylén. Descripción de la batalla y auxilios que en ella dieron los vecinos». Jaén, 1897. 2ª edición. Con notas de Alfredo Cazabán Laguna.
-
De Haro Malpesa, Jesús: «María Bellido no hay más que dos». Programa de Fiestas de 2000.
-
Linares Lucena, Francisco A.: «Entre la historia y la leyenda». Programa de Fiestas de 2007, pp. 116-120
-
López Pérez, Manuel: «María Luisa Bellido, la heroína de Bailén». Boletín del Instituto de Estudios Giennenses, nº 46, 1978, y Revista de Historia Militar, Año XXIV, nº 49 y año XXV, 1981, nº 50.
-
Soler Cervantes, Milagros: «María Bellido: el misterio de un mito. La batalla de Bailén y la importancia del agua». Página web http://www.culturandalucia.com/JA%C3%89N/Maria_Bellido.htm.
-
Soriano Izquierdo, Juan: «Mitos y leyendas para una Batalla. María Luisa Bellido». Revista Solera, nº 5, 2006.
1 comentario
Pingback: María Bellido es homenajeada en el 205 aniversario de su fallecimiento - Toda la actualidad de Bailén permanentemente actualizada.