Los días de acampada y fiesta en la aldea de Zocueca para celebrar la romería en honor a la patrona de Bailén dejan buenos recuerdos y emociones pero, paralelamente, también dejan este paraje natural colmado de basura y desperdicios.

Son pocos los romeros que, cuando llega el momento de recoger, limpian la zona donde han estado instalados y contribuyen al mantenimiento de la aldea. Es el turno de los servicios de limpieza del ayuntamiento de Bailén, que se afanan desde este lunes en dejar en las mejores condiciones estos terrenos que, hace unos días, bullían de gente y que ahora acumulan, aproximadamente, 40.000 kilos de basura o, lo que es lo mismo, 40 toneladas de desechos, suciedad y restos que los acampados no han recogido. Las zonas más afectadas son los márgenes del río Rumblar y la dehesa junto al arroyo de la Fresneda.