La Guardia Civil ha imputado a los cuatro promotores de una obra en la Avenida de Linares como presuntos autores de delitos contra los derechos de los trabajadores, contra los recursos naturales y el Medio Ambiente, todo tras la demolición de una cubierta de una nave industrial en dicha calle.

Según informa la Benemérita, el Servicio de Protección de la Naturaleza se desplazó hasta el lugar (dos naves industriales con una superficie aproximada de 3.400 metros cuadrados) ante la sospecha de que la cubierta de fibrocemento pudiera contener amianto. El Seprona recogió varias muestras que fueron enviadas al departamento de Química y Medio Ambiente del laboratorio de Criminalística de la Guardia Civil en Madrid, donde se confirmó que el material contenía amianto de variedad crisolito y crocidolita con diámetros respirables. Además, confirmaron que las placas se encontraban en mal estado de conservación, por lo que podrían emitir fibras de amianto al ambiente.

El amianto puede provocar enfermedades del aparato respiratorio, especialmente para los trabajadores que se exponen a él manipulándolo e inhalando las fibras que pueden quedar en suspensión en el aire. Según informa la Guardia Civil, los trabajos de demolición de esta cubierta los realizaba una empresa que no se encuentra inscrita en el Registro de Empresas con riesgos de Amianto y que tampoco elaboró el correspondiente Plan de Trabajo por el que se establecen las disposiciones mínimas de seguridad y salud aplicables a los trabajadores con riesgo de exposición al amianto.

Además, el Seprona comprobó que los trabajos no disponían de la obligatoria licencia municipal de obras, ni del proyecto de ejecución donde se incluye la gestión de los residuos que se puedan generar tras las obras. Por todo ello, los cuatro promotores de la obra han sido imputados como presuntos autores de delitos contra los derechos de los trabajadores, los recursos naturales y el medio ambiente.